
26 Ene Rutina facial para expertas
La semana pasada hablamos de los pasos esenciales en una rutina diaria, pero si te gusta este mundo y quieres convertirte en una experta, no debes perderte el blog de esta semana.
Obviamente no es necesario seguir todo estos pasos, de hecho hay profesionales que no lo recomiendan ya que algunos productos pueden disminuir la eficacia de otros. Pero hoy vamos a hablar de una rutina completa, todos los pasos para los que hay cosméticos específicos, y su orden de aplicación.
Hay que tener en cuenta que de día o de noche no se siguen los mismos pasos, ni son convenientes los mismos ingredientes por lo que esta va a ser nuestra primera división. El ácido hialurónico, la vitamina C y la niacinamida se recomienda tanto de día como de noche, sin embargo, el retinol o los ácidos exfoliantes como pueden ser el glicólico o sacílico se recomienda mejor en la noche.
Enfocándonos en la rutina de la mañana tenemos que tener en cuenta nuesta exposición a gentes externos ya sea a los rayos UVA y UVB, contaminación, … También va a ser importante conocer qué tipo de piel tenemos. Vamos a diferenciar 5 tipos: piel normal, piel sensibles, piel seca, piel grasa y piel mixta. La piel normal presenta una textura regular sin imperfecciones aparentes y un aspecto suave y limpio, por lo que no necesita de cuidados especiales. La piel sensible destaca porque es más reactiva a determinados estímulos, y puede ser tanto grasa como seca, se trata de una piel frágil, sin función protectora, lo que facilita la entrada de microorganismos y sustancias irritantes provocando sensaciones de incomodidad como calor, tirantez, enrojecimiento o picor, y aumentando las posibilidades de sufrir reacciones alérgicas.
La piel seca se puede relacionar en muchos casos con temporadas pasajeras, es causada principalmente por factores externos como el clima, la baja humedad del aire, y la inmersión en agua caliente. Si no tratamos correctamente este tipo de piel, podríamos provocarnos eccemas cutáneos o incluso infecciones, ya que la piel seca se agrieta quedando más expuesta a bacterias. Este tipo de piel se relaciona con la piel atópica, una enfermedad cutánea que se caracteriza por la sequedad en la piel, que se desencadena por factores ambientales, alérgicos, y/o alimenticios. En cuanto a la piel grasa, se identifica por su apariencia porosa, húmeda y brillante. Es el resultado de un exceso de producción de grasa por las glándulas sebáceas. Suele estar determinado por causas genéticas y/o hormonales, y relacionada con la aparición de acné. Por último la piel mixta es la que tiene características de la piel seca y de la grasa, debido a que la distribución de las glándulas sebáceas y sudoríparas no es homogénea. La zona más grasa suele corresponder a la zona T (frente, nariz y barbilla), mientras que en las mejillas la piel es normal o seca.
Una vez identificado nuestro tipos de piel, debemos utilizar productos aptos para ella. Siguiendo con la rutina de mañana, la vamos a ordenar igual que en la anterior entrada incluyendo nuevos pasos dentro de cada apartado.
En primer lugar se lleva a cabo la limpieza, este paso consiste en preparar la piel para la hidratación y en su versión más extensa incluiría los siguientes pasos: en primer lugar utilizar un limpiador a base de aceite de textura cremosa o gel, le sigue un limpiador a base de agua como puede ser el famoso agua micelar, le seguiría la exfoliación que dependiendo el producto se recomienda espaciar más o menos su aplicación, ya que existen exfoliadores suaves que permiten una aplicación diaria, frente a otros mas agresivos que permiten una semanal, y finalmente la aplicación de un tónico, que en función de nuestro tipo de piel y los resultados que busquemos, aplicaremos un tónico hidratante, calmante, exfoliante, antioxidante, iluminador, unificante…
El siguiente paso sigue siendo la hidratación, para una completa y correcta hidratación deberíamos seguir el siguiente orden, que empieza por la esencia, refiriéndonos al novedoso producto conocido como Mist, se trata de un producto de una textura diferente que se aplica en forma de nube humectante, el nombre procede de la palabra neblina en inglés, pero estos productos contienen ingredientes capaz de aportarnos hidratación, luminosidad,… existen distintas combinaciones que se ajustan a los distintos objetivos de las rutinas faciales. El siguiente producto a aplicar sería el serum también específico según nuestro tipo de piel y tratamiento que le queramos dar, seguido de una mascarilla en caso de que sea hidratante, ya que si se trata de una mascarilla exfoliante o antioxidante … la meteríamos en el primer paso de preparación de la piel para la hidratación, el contorno de ojos puede ir aquí o al final, todo va a depender de si tiene algún efecto lifting, despigmentante,… en este caso lo colocaríamos aquí y finalmente la crema hidratante. Pero si el contorno es únicamente hidratante se aplica al final, ya que con la crema facial no solemos insistir mucho en esa zona y es una zona muy importante y delicada que requiere un tratamiento exclusivo del resto del rostro.
Llegamos al último paso que como ya sabemos es la protección. Se trata de proteger nuestra piel de los rayos UVA y UVB, para prevenir el foto-envejecimiento y no dejar que los rayos solares oxiden las propiedades de nuestros cosméticos previamente aplicados. Este paso va a diferir en rutina de noche o de día, ya que en la de noche aplicaremos una mascarilla de noche en caso de utilizar, o dejaremos la crema hidratante como último paso.
Tipos de pieles y recomendaciones.
Existen muchos mitos sobre que es mejor según tu tipo de piel, hay gente con piel grasa que piensa que le va mejor no hidratarse la piel para que no le salgan granitos. Esto es un completo error, los 3 pasos de limpieza, hidratación y protección que hablamos en este y el anterior blog son esenciales e importantísimos para tener una piel sana. La solución está en encontar un producto adecuado para ti, igual lo que te falla no es la crema hidratante si no que necesitas un tónico mas agresivo o un serum que regule y unifique la producción de sebo en tu piel.
La piel seca y/o sensible necesita hidratantes intensivas, estos tipos de piel requieren mucha constancia sobretodo en las temporadas donde los agentes externos juegan en su contra.
La piel mixta puede utilizar distintos serum en la mañana y en la noche, para cada parte grasa o seca de su piel. Los productos aptos para pieles normales, pueden no ser compatibles con la piel seca o sensible, por eso es importante que cuando introducimos nuevos productos en nuestra rutina los introduzcamos progresivamente y comprobemos que son eficaces y nos ayudan a mejorar resultados.
Y recuerda: Las cremas que son impecables para algunas personas, pueden no serlo para otras, aunque se trate del mismo tipo de piel.
En nuestra web poryparami.es podéis encontrar distintas opciones si queréis añadir alguno de estos nuevos pasos a vuestra rutina. A continuación os dejamos una rutina completa con nuestros productos:
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